Michael Vierkant abandona muy pronto su ciudad para perseguir un sueño: convertirse en artista. Autodidacta que considera los cafés su universidad, vivirá de lleno el nacimiento de un nuevo mundo en plena bohemia muniquesa de principios del siglo xx, para luego arrojarse a los «locos años veinte» en Berlín. A pesar de las luces y el brillo de la metrópolis, el ambiente comienza a ser agónico, crepuscular. Esta sobresaliente novela, autobiográfica en parte, nos sumerge en una época extraordinaria, revelándonos todo un mundo apasionante: de los ardores belicistas que anuncian la I Guerra Mundial a las promesas del periodo de entreguerras, de la crisis económica al ascenso del nazismo, del esfuerzo inhumano por escapar de la Francia ocupada a una cómoda existencia como guionista en Hollywood.