«Ya verás, pronto florecerán los tilos y entonces...». El joven Kóstik está estudiando el último curso en el instituto de Kiev cuando recibe un telegrama avisándole de la inminente muerte de su padre. Con este viaje hacia la finca familiar para despedirse de él, Kóstik también emprendre una travesía al mundo de su infancia, un paraíso perdido en el que los días vividos con su familia y sus compañeros de clase —entre los que se encontraba Bulgákov— se mezclan con eventos tan trascendentales como la visita del zar a su instituto o la muerte de Tolstói. Y en esta vorágine de recuerdos y sucesos, se va abriendo camino la fascinación por la literatura. Publicada en 1964, «Los años lejanos» es la primera pieza de esta odisea monumental que es «Historia de una vida». Con la narración del viaje hacia su padre moribundo, Konstantín Paustovski empezó una de las obras más extraordinarias de la literatura rusa y universal, por la que fue nominado varias veces al Premio Nobel de Literatura. Unas memorias íntimas, líricas y vibrantes que, alcanzando el impulso de una novela de formación, constituyen un ret