En Elba un apicultor espera la llegada de Napoleón, confinado a la isla en mayo de 1814. Entre ambos se establece una relación sorprendente y obsesiva. Un vínculo de profundas resonancias en un libro de singularísima atmósfera. La prosa envolvente de José Luis de Juan y una inusual mezcla de historia y ficción dotan al relato de un poderoso encanto.