Frente a un modelo de supuesta excelencia educativa basada erróneamente en lo cuantitativo -que ha demostrado su estrepitoso fracaso-, resulta urgente promover una "mirada profunda", una forma de mirar la realidad a lo largo, lo ancho y lo profundo, lo que nos permitirá un mayor enriquecimiento personal e intelectual.
El arte de leer creativamente, escrito por uno de los más afamados filósofos vivos de España, sostiene que es más importante la calidad de la lectura que la cantidad. Propone un modelo, sencillo pero tremendamente eficaz, en el que la calidad de la lectura se alcanza cuando leemos de forma genética, reviviendo el proceso de gestación de cada obra, de un modo receptivo y activo, es decir, creativo. Gracias no sólo a una clara exposición de las ideas, sino también a los numerosos ejemplos que jalonan la obra, el lector dispondrá de pautas claras y comprensibles para poder "leer creativamente".