La guerra llamada "civil" fue un arrollador terremoto que dejó el solar hispánico en ruinas en su cuerpo físico pero sobre todo en su alma de nación. Un Larra redivivo habría cambiado su fatídico epitafio de un siglo antes por otro aun más atroz: " Aquí yace toda España, murió de su propia mano". Esta catástrofe histórica en la que la verdad profunda es que todos los españoles fueron derrotados y cuyas secuelas siguen todavía hoy presentes en el vivir colectivo de la nación es el trágico ámbito en que se desarrollan los trece relatos de este libro.