¿Conoces esa sensación en el estómago que te dice que algo estámal, pero aun así te hace sentir bien? Esa era la sensación que teníaMackenzie Taylor desde hacía semanas. Y ahora esos miedos se habíanhecho realidad.
Y lo supo. Nunca debió entrar en esejuego.Nunca debió obedecer a su madre. Nunca debió permitir que laarrastrara a su juego de adultos.
Pero, sobre todo, nunca,jamás, debió enamorarse de él.
Bienvenidos a Rock Hill.Bienvenidos a Bad Romance.