"En Leopardo Negro, Lobo rojo, Sogolon, la Bruja Luna, demostró ser un personaje secundario fascinante: una hechicera de 177 años con sus propios intereses, que supo encandilar al público lector y que fue un digno adversario para el Rastreador durante la búsqueda del misterioso niño desparecido. En Bruja Luna, Rey Araña, ha llegado su turno: Sogolon adquiere el protagonismo y ofrece su propia versión de lo ocurrido, su propio relato de lo que le sucedió al niño, de cómo planeó y luchó, triunfó y fracasó en esa búsqueda. Pero esta novela es también la historia de una enemistad de un siglo entre Sogolon y Aesi, el canciller del rey, un personaje oscuro, letal y poderoso, a quien no es fácil desafiar. Sogolon lo hace por sus propios motivos.