Ellos se convirtieron en héroes por sus hazañas, por enfrentarse a monstruos y derrotar enemigos, por conquistar ciudades y también mujeres. Las constelaciones llevaban sus nombres y sus victorias traspasaron tiempos y fronteras.Ellas, sin embargo, jamás fueron consideradas heroínas, a pesar de aguantar infidelidades, de ser abandonadas, de llevar solas sus hogares y familias, de desafiar las convenciones sociales y de superar la mayor de las gestas: sobrevivir en un mundo de hombres.En contra de la tradición literaria imperante, esta recopilación de cartas escritas por Ovidio en el siglo I nos ofrece un retrato empático, justo, sincero y diferente de algunas de las mujeres de la mitología griega. Sus reivindicaciones, luchas y anhelos no pueden ser de mayor actualidad.