Munif toma un oasis de Arabia y lo convierte en el espejo de sus
habitantes. La novela es, en su conjunto, un retrato meticuloso y
paciente de la sociedad beduina, y es una metáfora que muestra
la revolución social, económica y política que siguió al
descubrimiento del petróleo, la destrucción del equilibrio entre
el hombre y la naturaleza, del choque entre los países árabes
ricos y pobres, así como de la complicidad de Gran Bretaña y
Estados Unidos para asegurar su influencia en la zona. La
naturaleza y el ritmo de vida beduina van retirándose a la par
que sus códigos morales, la dignidad de sus gentes y sus formas
de salvar y transmitir el pasado.
El título de esta novela alude a la condición perecedera de unas
ciudades que, a semejanza de lo ocurrido con muchas de las que
surgieron en los Estados Unidos durante la fiebre del oro, están
condenadas a desaparecer.
La traducción que presentamos transmite las sutilezas de la
ambigüedad y los matices inherentes a la lengua y cultura
árabes.
El prólogo, escrito por José Miguel Cañada (subdirector de la
Escuela de Traductores de Toledo), da todas las claves de la
importancia de esta novela que ha sido calificada de "joya de la
literatura árabe" por parte de Graham Greene.
La afirmación de Edward Said: "Ciudades de sal" es la
única obra seria de ficción que intenta mostrar los
efectos del petróleo, los norteamericanos y la
oligarquía local en un país del Golfo pérsico."