Al día siguiente de mudarse de casa, Coraline explora las catorcepuertas de su nuevo hogar. Trece se pueden abrir con normalidad, perola decimocuarta está cerrada y tapiada. Cuando por fin consigueabrirla, Coraline se encuentra con un pasadizo secreto que la conducea otra casa tan parecida a la suya que resulta escalofriante. Sinembargo, hay ciertas diferencias que llaman su atención: la comida esmás rica, los juguetes son tan desconocidos como maravillosos y,sobre todo, hay otra madre y otro padre que quieren que Coraline sequede con ellos, se convierta en su hija y no se marche nunca. ProntoCoraline se da cuenta de que, tras los espejos, hay otros niños quehan caído en la trampa. Son como almas perdidas, y ahora ella es suúnica esperanza de salvación. Pero para rescatarlos tendrá tambiénque recuperar a sus verdaderos padres, y cumplir así el desafío quele permitirá volver a su vida anterior.