Rural pero urbana, realista pero simbólica, reciente pero intemporal. A medio camino entre Diez negritos y Diario de un cazador, es una novela de mentiras y secretos, de héroes y canallas, que oscila entre la literatura de campo y la más pura y adictiva novela negra.
Una casa de campo en Extremadura. Seis hermanos de una acomodada familia madrileña se han reunido para resolver los problemas financieros de su insensata madre. A través del retrato psicológico de personajes con un pasado común que, sin embargo, han evolucionado de forma muy diferente según sus circunstancias personales, hasta acabar en el distanciamiento y la desconfianza, esta novela refleja con toda su crudeza las mayores bajezas del ser humano: egoísmo, envidia, intolerancia, avaricia, traición? La sombra de un terrible suceso, y el fantasma del séptimo hermano, sobrevuelan cada conversación, y el lector se ve atrapado en un relato que culmina en un desenlace inesperado.
Las continuas referencias al pasado de la saga familiar, que nos transporta desde los inicios del siglo XX hasta la actualidad, pasando por los años 60 y 80 en Madrid, y todo ello enmarcado en la naturaleza del otoño extremeño, hacen que la trama constituya un auténtico y trepidante guion cinematográfico, en el que los secretos se esconden tras los diálogos.
Mario Alonso se adentra en el mundo de las relaciones familiares, en la reflexión sobre la corta distancia que hay entre la verdad y la mentira, y en la diferencia, a menudo imperceptible, entre la realidad y los espejismos, entre el ser y el parecer.