Daniel, un profesor, próximo a jubilarse, conoce a la mujer de sus sueños, compañera de labores, bastante más joven que él. Su nombre es Amaia, dueña de una sonrisa que lo cautiva. Ambos inician una amistad que, de a poco, se va transformando en algo más que eso. Él le escribe poemas y ambos encuentran puntos en común. Ella se marcha a otra ciudad, pero se mantienen comunicados vía e-mails. La relación parece peligrar, a veces, pero la pasión que él le pone, hace que esta evolucione hasta llegar al sorpresivo final