La globalización de nuestras condiciones sociales también está afectando el ámbito del Derecho penal. El terrorismo, el tráfico de armas, drogas son algunos de los casos que sobrepasan las fronteras y representan, por sus paradojas, un desafío para la filosofía del derecho. Höffe plantea preguntas de extrema actualidad: ¿Existe un derecho penal igualmente válido para la gente de color negro y la de color blanco, para judídos, cristianos, mahometanos y budistas, para corredores de bolsa y cultivadores de arroz, para los militares serbios y los mudjahedín afganos? Los argumentos a favor de un Derecho penal interculturasl se iluminan en el presente estudio mediante un análisis paralelo de la situación actual en diversas culturas. Pero también se muestra en un importante repaso histórico de la legislación en el Oriente antiguo, en la Grecia clásica, el antiguo Israel y el Imperio Romano, que la sensibilidad y los esfuerzos por resolver los dilemas de las diferencias culturales no son en absoluto sólo el mérito de la Modernidad.