Numerosos autores han narrado los episodios de la conquista del Tahuantinsuyu, la historia del Imperio inca, pero muy pocos han abordado la situación de la mujer durante ese periodo. En el presente libro, María Rostworowski parte de la pregunta sobre cuáles eran los sentimientos de las mujeres andinas frente al invasor, para que comprendamos el contexto del nacimiento y la vida de Francisca Pizarro. Y es que estas mujeres tuvieron un contacto más directo y estrecho con los conquistadores, por ser amantes, esposas, mancebas, prostitutas o sirvientas; entre las mujeres indígenas y los invasores se estableció desde muy temprana fecha una obligada relación de dependencia. De estas uniones furtivas o estables nacieron los primeros mestizos de Perú. La más destacada e insigne de aquellas mestizas de la primera generación fue doña Francisca Pizarro, hija del famoso conquistador Francisco Pizarro y de doña Inés Huaylas Yupanqui, hija a su vez de Huayna Capac, soberano del Tahuantinsuyu, y de Contarhuacho, curaca y señora de Ananguaylas. Francisca Pizarro, desde muy joven, fue traída a España, donde tuvo una vida