Emprendida por amigos e intelectuales destacados de su época, la edición conmemorativa de las obras completas de Gabriel Miró (1879-1930) muestra la relevancia de este escritor alicantino en la literatura española, y ahora Renacimiento la recupera de manera facsimilar dentro del catálogo de Ediciones Ulises. En el volumen IV, con prólogo de August Pi i Sunyer –médico y filósofo catalán–, se reúnen dos de sus novelas. En Nómada (1908), que Miró escribió en los comienzos de su carrera, don Diego, tras la muerte de su mujer y su hija, comienza un peregrinaje de tristeza, con reminiscencias del decadentismo y la bohemia. Años más tarde, Miró recurre en El abuelo del rey (1915) a un personaje colectivo: Serosca –recreación literaria de Alcoy– es una ciudad levítica, dominada por la intransigencia del clero, en la que la decadencia de una estirpe familiar refleja el fin de la sociedad feudal en España. En ambas obras, los personajes de Miró viven de sueños e ilusiones, que la realidad se encarga de desmentir. Don Diego, en Nómada, quiere convencerse de que sus miserias pueden tomars