Esta obra aborda el continuismo de la temática solar religiosa en la sensibilidad cultural republicana e imperial romanas. Aquí pretendemos dar congruencia al recorrido que muestran las fuentes y las evidencias de evolución en la adoración solar hasta el reinado de Constantino con un estudio centrado en el occidente mediterráneo.
A la vez que el culto a Sol pervive por siete siglos en espacios públicos y en la memoria romana sin un papel religioso especialmente destacado inicialmente, es posible percibir el creciente uso de elementos de su adoración dentro de distintos aspectos discursivos, literarios y de la imagen imperial por connivencia de intereses. El culto solar se mezcla así con distintos aspectos culturales en el mundo romano. Esto confiere al dios que los romanos llamaron "Sol" un carácter polifacético que es usado por los adoradores de diferentes cultos romanos para expresar ideas religiosas y simbólicas similares, e incluso para denominar a dioses diferentes. Existen diferentes ámbitos donde se observa esta percepción religiosa sobre Sol desde época republicana hasta el siglo IV d.C. Teniendo cada una sus peculiaridades, las distintas fuentes literarias y materiales responden a un patrón común que se puede comparar a lo largo de este periodo y permite explicar el papel de lo solar en la representación del poder y algunos cultos del siglo III d.C.