«¿Cómo ha de robar la amapola el sueño de la misma fuente / que da a la vid el jugo capaz de enloquecer y alegrar / ¿Cómo la maleza halla alimento para su grueso tejido / donde los lirios lucen sus flores, que son pura algarabía » A finales del siglo XIX, en una isla rocosa frente a la costa de Maine, Celia Thaxter cultiva un jardín que empezó a cuidar desde niña. Impulsada por muchos amigos y conocidos deseosos de descubrir sus secretos, decide contar su experiencia como jardinera en un diario que se desarrolla a lo largo de un año. Así nació este espléndido libro, que ofrece toda una serie de valiosas sugerencias: qué suelo preferir para sembrar, cómo limpiar las malas hierbas, qué remedios naturales utilizar para acabar con insectos y caracoles o cómo evitar que los pájaros se coman las semillas. Gracias a una prosa capaz de traducir vívidamente los colores y olores del jardín, junto a los aspectos prácticos del cuidado de las plantas, surge también el asombro de la autora ante el milagro de la naturaleza, pero, sobre todo, el amor que siente por su creación botánica, que es en última instancia el secreto