El islam es uno de los grandes desafíos de occidente. El crecimiento ecónomico del bloque oriental formado por Asia y los países árabes ha sacudido a Europa delatando sus debilidades financieras y su problemática capacidad de asimilación de los flujos migratorios procedentes de Oriente Próximo. Este conflicto entre la civilización islámica y cristiano-europea se agudiza cuando intentamos extrapolar los valores sociales de esta en aquella: la democracia laica contra la teocracia, el igualitarismo contra el patriarcado, las energías renovables contra la explotación petrolífera... uno de los temas más sensibles en este choque de civilizaciones es el papel de la mujer y la consideración de los derechos LGBT en una sociedad marcadamente conservadora y religiosa como es la islámica. El rostro materno de Al-lâh parte de un estudio histórico del patriarcado en las sociedades islámicas para terminar desarrollando una interpretación feminista de sus valores partiendo de los textos coránicos. A través de un fecundo análisis, se pone en evidencia el cartácter anti-patriarcal de la teología islámica conformando un discur