El desarrollo tecnológico ha propiciado nuevas formas de interaccionar con otras personas y con los modernos dispositivos. Además, la demanda laboral de dedicación ininterrumpida en los procesos de fabricación industrial, y en los servicios sanitarios y de protección ciudadana en nuestra sociedad 24/7, suponen un cambio drástico en las organizaciones hacia modelos de horarios basados en el trabajo por turnos. Estos cambios implican nuevos desafíos para la sociedad actual. La automatización de procesos en ingeniería y las nuevas herramientas tecnológicas han cambiado la naturaleza de los trabajos, aliviando el esfuerzo físico a cambio de un mayor esfuerzo mental. Los análisis de accidentes en la aviación y en las centrales nucleares han destacado el papel del factor humano y sus limitaciones psicológicas y cognitivas como un elemento esencial que debe considerarse en el diseño de artefactos, tareas, técnicas de comunicación, así como en las políticas de prevención de riesgos y promoción de la seguridad. Las enfermedades asociadas al sistema de trabajo por turnos, especialmente cuando implica horario de noche