El libro que el lector tiene en sus manos es una excelente introducción a la filosofía política. Y lo es por tres razones principales: por el ámbito que abarca, por la capacidad argumentativa, por la claridad de exposición. En efecto, el libro ofrece una excelente panorámica de los problemas centrales de la filosofía política hasta hoy, así como de los diversos intentos de dar respuesta a esos problemas. El autor dibuja, pues, con mano maestra los interrogantes del pensamiento político que han fascinado a filósofos y pensadores durante más de dos mil años. En este sentido, la obra, a pesar de su moderada extensión, viene a completar el trabajo ya clásico de Will Kymlicka ?recomendado por el propio Wolff? y el más reciente de Roberto Gargarella, ambos centrados en la filosofía política de la época contemporánea. Por su parte, el libro de Jonathan Wolff trenza, capítulo a capítulo, el recorrido entero de la reflexión política, a la vez que subraya con fuerza la permanente actualidad de las cuestiones planteadas. Se trata de una introducción que interesará tanto a principiantes como a lectores ya iniciados en temas de filosofía política, tanto a un público no especialista como a estudiantes universitarios. Desde luego, no es nada frecuente poder disponer de una introducción tan clara y, a la vez, tan completa como ésta. Me permito, pues, recomendar vivamente la lectura pausada del libro. El beneficio intelectual está garantizado, porque el libro acaba cumpliendo el deseo de su autor: mostrar cómo se hace filosofía política. Realmente, pocos libros consiguen tan fácilmente como éste que el lector, tras asistir a la preparación de los ingredientes, llegue, a las pocas páginas, a saborear resultados.