Alejandro Farnesio, príncipe de Parma, y Ambrosio de Spínola fueron los dos generales más ilustres y competentes al frente del ejército español durante las guerras de Flandes de finales del siglo XVI y principios del XVII. Leales soldados a los reyes que sirvieron -Felipe II, III y IV-, no dudaron en ceder su fortuna personal para acometer las empresas militares. Ambos eran hombres ilustrados: italianos, estudiosos de los clásicos, ricos, amantes de las matemáticas y de los tratados de ingeniería que aplicaron con pasión al arte de la guerra y al sitio de las ciudades, donde demostraron ser consumados especialistas. Desplegaron mucha más visión política que los reyes, los validos de turno o los aristócratas, e hicieron gala de una tolerancia muy superior a la de sus señores.
Supieron ejercer el mando combinando la dura disciplina y la capacidad de convicción, lo que les convirtió en perfectos líderes, respetados y seguidos por sus hombres. Casi nunca recurrieron a métodos sanguinarios, ya que preferían el pacto y la persuasión, en fuerte contraste con su antecesor en el gobierno de Flandes, el duro e inflexible duque de Alba.
Juan Carlos Losada aborda esta historia con rigor y amenidad, aproximándonos al panorama de aquella contienda casi como si de una novela de aventuras se tratase, sin renunciar a los datos ni esconder los trágicos sucesos que llevaron a la monarquía española a su decadencia y sumieron al país en la pobreza más absoluta.