Se harán siempre cortos los adjetivos para describir al jerarca nazi Hermann Goering, auténtico héroe de la Primera Guerra Mundial, cuya vida dio un vuelco radical cuando conoció a Adolf Hitler en el otoño de 1922: conspirador de taberna, golpista improvisado, militante errante, parado morfinómano, talentoso hombre de negocios, dandy corpulento, orador estruendoso, diputado mercenario, truhán reconocido, delincuente ocasional, nuevo rico, cazador de élite, estratega de salón, economista amateur, precoz ecologista, coleccionista compulsivo, ministro sin escrúpulos y cómplice de todos los crímenes cometidos por su jefe.
A partir de ese encuentro, el popular y carismático veterano de guerra, presidente del Reichstag, ministro del Interior y ministro del Aire, jugó un importante papel en el ascenso y la posterior caída del nazismo por sus considerables errores militares y estratégicos.
En esta completa biografía del jerarca nazi, François Kersaudy aúna el talento y el rigor histórico necesarios para descubrirnos a este insólito personaje.