Platón (c. 427 - 347 a. C.) nos ofrece en su Gorgias un diálogo de una indiscutible actualidad centrado en analizar la naturaleza de la retórica y la justicia. ¿Se puede ser feliz y ser injusto al mismo tiempo? ¿Puede un político tomar decisiones que no se ajusten a la moral y ser realmente poderoso? Platón, por boca de Sócrates, defiende con una pasión inusitada sus puntos de vista en un diálogo con una estructura más compleja de lo habitual y perfectamente trabada. La sucesión de tres discusiones consecutivas y de creciente intensidad que mantiene Sócrates con el retórico Gorgias, con su discípulo Polo y con Calicles, permiten al filósofo ático plantear profundas reflexiones sobre la verdadera finalidad de la retórica, sobre la justicia moral y sobre el ejercicio del poder por parte de los políticos.
«Es un diálogo que se puede seguir de principio a fin sin una preparación filosófica previa. Las conclusiones precipitadas o las faltas de lógica que el lector puede encontrar, que requerirían mayor explicación, no entorpecen la secuencia de las ideas y tienen el contrapeso literario del apasionamiento en la exposición. En estos datos podemos resumir la modernidad del Gorgias».
Julio Calonge