A sus quince años, Khalid lleva una vida de lo más normal, como sus amigos. Aunque no le entusiasma demasiado, tiene previsto viajara Pakistán junto con sus padres. Entonces comienza una verdadera pesadilla. Khalid es secuestrado y llevado a un lugar donde «lo más normal» son la tortura y el terror: la bahía de Guantánamo.