«El mundo que vio medrar al hombre blanco entre promesas de que encontraría su lugar en la escala económica por su cara bonita está a punto de pasar a la historia. Sí, es verdad que se puso a la cola, que respetó las reglas del juego y pagó sus impuestos. Este es el ideal del sueño americano, el ideal de la meritocracia. Pero dicho ideal omite que, durante generaciones, la partida ha estado amañada. Así, cualquier acercamiento a la igualdad les parece una derrota catastrófica». ¿POR QUE ESTAN LOS HOMBRES CABREADOS Michael Kimmel, uno de los más prestigiosos sociólogos a nivel mundial en estudios sobre la masculinidad, se hizo esta pregunta en el año 2013. Para responder a ella, decidió pasar cientos de horas en compañía de estos «Angry White Men»: desde activistas por los derechos de los hombres, pasando por supremacistas blancos, estudiantes o, sencillamente, trabajadores de a pie. Lo que detectó fue toda una serie de cambios sísmicos de raíz económica, social, política y cultural, que ha dejado a muchos hombres, todavía anclados en una idea obsoleta de masculinidad, con una sensación de confusión, traición