Federico vive en un orfanato y sueña con hacerse superhéroe para vencer su miedo a la oscuridad. Un día encuentra unas botas mágicas que le permiten hacerse invisible. Él cree que ese hallazgo solucionará sus problemas y le permitirá realizar todo tipo de hazañas, pero se da cuenta de que no ser visto puede crear muchas complicaciones. A lo largo de su aventura tiene que tomar decisiones que pueden llevarlo por el camino del bien o por la senda del mal. Federico se inclina por las mejores decisiones. Cuando las botas mágicas salen de sus pies, le hacen ver que no es necesario poseer superpoderes para comportarse como todo un héroe.