Martín Guidú tiene que asistir a la jornada de padres de su sobrino Lucas porque su hermano Anakin está en el hospital. Todo debería ser fácil hasta que descubren el cadáver de una niña muerta. Reunidos en el jardín de la escuela Martín, Natalia y el inspector de policía Lorenzo Barriuso, tres desconocidos que se sumergirán hasta las profundidades de la maldad.