Bruno Salvador, conocido como Salvo entre amigos y enemigos, es un eterno ingenuo. Tiene veintinueve años y es el hijo natural, huérfano, de un misionero católico irlandés y la hija de un jefe congoleño. Siguiendo los consejos de su mentor, el hermano Michael, Salvo se preparó para ejercer como intérprete profesional de las lenguas africanas minoritarias que, casi desde su nacimiento, ha coleccionado obsesivamente.
Convertido en una joven promesa de su profesión, empiezan a cortejarlo empresas de la City, hospitales, tribunales de justicia, agencias de inmigración e, inevitablemente, los poderosos servicios de inteligencia británicos. Enviado a una isla anónima del mar del Norte para asistir a una reunión secreta entre financieros occidentales y señores de la guerra congoleños, Salvo se ve obligado a interpretar asuntos que nunca deberían haber llegado a su renacida conciencia africana.
A ratos thriller, a ratos historia de amor y a ratos alegoría cómica de nuestro tiempo, La canción de los misioneros cuenta el viaje he-roicamente ingenuo de Salvo desde las tinieblas de la hipocresía occidental hasta el corazón de la luz.
«Un relato hondo y macabro, hermoso y nada solemne. Justamente, nuestra idea de la diversión.»
FRANCISCO CASAVELLA, El País
«Nadie, hoy día, domina mejor el arte del suspense. Nadie más sabe construir una trama tan maravillosamente compleja. Lectura imprescindible.»
Sunday Telegraph