Partiendo de la premisa de que privatizar el mundo y progresar hacia la barbarie son lo mismo, el propósito de la presente obra es apuntar líneas de reflexión en el plano jurídico-político en dirección opuesta a la señalada por el ecoliberalismo o ecologismo de libre mercado, es decir, negando la "privatización del mundo" como receta universal para resolver los grandes problemas que plantea la crisis ecológica.