«No amo a Sonny Flannery. Nunca lo he amado. Y nunca lo amaré».
Éstas son las terribles palabras que Kelley Winslow pronunció para proteger al chico al que quería, aunque sabía que con ellas le rompería el corazón.
Y es que Kelley está dispuesta a hacer todo lo posible para proteger a Sonny y para hallar un lugar en el que puedan volver a estar juntos. Para ello, tendrá que aprender a usar su propia magia y descubrir quién es el responsable del peligroso poder de Sonny y qué se esconde detrás de los guardias Janos que van a la caza de inocentes hadas. Una misión llena de peligros que deberá combinar con la no menos difícil tarea de reconstruir la compañía de teatro que tan importante fue para ella.