"A sus cincuenta y nueve años, Valdemar Roos está cansado de la vida: odia su trabajo, apenas se habla con su esposa, su hijo le ignora y no se lleva bien con sus dos hijastras. Pero un buen día la suerte llama a su puerta: el número de lotería que juega cada semana, el mismo que jugó su padre durante toda la vida, resulta el ganador. Sin compartirlo con nadie, abandona su trabajo y se compra una pequeña cabaña en la remota campiña sueca. Todos los días viaja a su oasis particular y regresa cada noche a su ordenada y monótona vida. Por primera vez en mucho tiempo, Valdemar es feliz.