"El mago invoca en secreto a las fuerzas de la oscuridad. El grimorio ha sido abierto. Habla. Grita. A veces sangra. Invoca a los espíritus del inframundo. El libro se convierte en la puerta que comunica el mundo de los vivos con la sugerente y etérea morada de los muertos. Ya no hay vuelta atrás. Hemos de prepararnos para lo que nos espera, pobres mortales, al pasar una a una las páginas prohibidas.