Aunque vivimos inmersos en las ideas y los productos científicos, hay una gran confusión sobre lo que esto significa. Sin embargo, como muestra este libro, la ciencia está mucho más próxima a los demás saberes ?al arte, a la literatura o simplemente a la gente de la calle? de lo que se suele creer. Comprenderlo así es un paso necesario para tender puentes entre las famosas dos culturas ?la científica y la humanista?. Sólo de este modo será posible acercarse a la solución de los graves problemas del mundo de hoy o abordar con éxito la ineludible reflexión ética.