La guerra de los Balcanes o la guerra de la sinrazón. Es decir, la guerra a secas. Este es el relato de un serbio que cree en la compasión humana, y que con su prosa lacerante y catártica, a ratos áspera, en otros desbordante de lirismo, revive desde dentro el trágico destino de Belgrado tras la descomposición de Yugoslavia.