Con una prosa muy directa, que llega al fondo del alma, esta novela autobiográfica, que ganó el prestigioso Premio Femina en 1910 (vendió cien mil ejemplares en múltiples reediciones) y que con mucha probabilidad dio el nombre a la famosa revista de moda Marie Claire, narra la historia de la infancia y de la adolescencia de la autora, desde el fallecimiento de la madre y los años difíciles en el orfanato de Bourges, en Francia, bajo el cuidado de la bondadosa hermana Marie-Aimée, hasta cuando, todavía pequeña, fue mandada, para ser pastora, a una granja en Sologne, donde conocerá al joven Henri...
El escritor y crítico de arte Octave Mirbeau escribió en el prefacio de la primera edición: «Lean Marie-Claire... Y, cuando lo hayan leído, sin querer herir los sentimientos de nadie, se preguntarán cuál de nuestros escritores y hablo de los más afamados sería capaz de escribir un libro así, con tal impecable mesura, y una pureza y grandeza tan radiantes».