Veinte años después del sangriento final de 'Little Tulip', Azamitrabaja para la policía. Ha ganado volumen y tomado demasiadosesteroides. Se encuentra en un callejón al bebé que su condiciónfísica le impide tener y decide adoptarlo, como hizo Pavel con ella en su día. Mientras, al tatuador le alcanza su pasado. Los fantasmas del gulag amenazan con devorar a sus seres
queridos ytendrá que echar mano de todo lo aprendido para enfrentarse a ellos:el poder místico de su arte? y esa violencia latente, la misma deantaño. Desde Siberia hasta Nueva York todo el horror de su pasado sevuelve muy presente.