No es tan fácil llevar bragas es el reverso realista de las novelas chick lit. Atención: en estas páginas el lector encontrará mujeres de verdad.¿Cómo maneja una ejecutiva superwoman, acostumbrada a tenerlo todo bajo control, el hecho de que su marido le sea infiel en su propia cama? ¿Cómo se enfrenta una mujer que reniega del rol de la gran mayoría de sus contemporáneas a que su marido renuncie a compartir las tareas de la casa? Y ¿cómo escapa de su entorno una mujer asfixiada por los malos tratos? Con estas tres historias, Ana Manrique compone un mosaico amargo y vital a la vez que nos hace reflexionar sobre el papel y los logros de la mujer de nuestro recién estrenado siglo. Una obra tierna, divertida e inteligente.