Desentrañar el significado histórico de la vigorosa figura de Pancho Villa (1878-1923) no es tarea fácil, por cuanto la misma ha quedado rodeada de múltiples capas de leyenda y mito. Tres grupos de leyendas son las que confunden nuestra comprensión del llamado 'Centauro del Norte'. La leyenda negra, la más extendida, que lo tiene por hombre sin escrúpulos y sanguinario. La leyenda épica, construida para mostrar las virtudes del héroe revolucionario. Y, por último, la leyenda blanca, relatada por el propio Villa, que desmiente a quienes lo tildan de amoral, ignorante y asesino. De ahí la importancia de estas crónicas escritas en 1914 por el periodista John Reed mientras acompañaba al antiguo cuatrero convertido en líder revolucionario; unas crónicas que nos muestran un Villa de carne y hueso