¿Cómo expresar lo que sientes al ver un cuadro? ¿Por qué convertir en un discurso sesudo lo que alguien transmitió mediante el juego, el movimiento y la experimentación? ¿Acaso una canción no pueden contar lo que nosotros sentimos frente a una pintura? Este poemario refleja la sensibilidad y el espíritu lúdico de quien mira desde el desconcierto a Picasso y se atreve a sacarlo al corro, a las cantinelas y al patio de la escuela. Es tan posible que en él veamos lo que nosotros sentimos, como que veamos en Picasso lo que allí se canta