La autora nos habla en el prólogo de aquellos años en los que sus circunstancias vitales fueron tan desbordantes que necesitó escapar de la presión del entorno; y escapó, «saliendo» (de su casa y de sí), caminando, con papeles en los bolsillos en los iba anotando lo que reclamaba su mirada. Todo esto, junto a destellos de la vida que quedaba dentro, junto a sus lecturas, escenas de relatos que escribía, sueños, películas, poemas que le salían al paso componen este libro único y singular, hecho de retazos, de añicos, de fragmentos, donde la autora, «personaje de papel» en el juego de su ficción, ha logrado crear el suspense de una novela, la trama de una historia: la de la pérdida del espacio que sostenía al personaje (su «casa del cielo») en la bajada (catábasis) al «infierno del asfalto y de las vanidades», para, ya desde el desengaño, ir recobrando la ruta primera, el regreso al origen (nueva anábasis), la vuelta a sí misma y a un intuido comienzo. Pero nada de esto se nos dará hecho: el lector habrá de caminar también por los múltiples puntos de fuga que le conducirán al todo, guiado solo por trazos y señales. Libro inclasificable, que atrapa de tal manera que será difícil dar un respiro a su lectura.
A veces surgen libros que podrían constituir un nuevo género, una nueva forma. Este es uno de ellos.
Una lectura en la que descubrir la naturalidad de lo distinto.
Rosa Romojaro. Nacida en Algeciras (Cádiz), vive en Málaga, desde donde ha venido desarrollando su labor como Catedrática de Universidad de Teoría de la Literatura y como creadora. Ha publicado ensayos críticos y teóricos (Lope de Vega y el mito clásico, Funciones del mito clásico en el Siglo de Oro; Lo escrito y lo leído, La poesía de Manuel Altolaguirre; Teoría poética y creatividad, Lope de Vega y la teoría de las funciones del mito
), ediciones de poetas contemporáneos (Moreno Villa, Altolaguirre
) y otras ediciones (Las Humanidades en el mundo digital?/?El mundo digital en las Humanidades), ensayos periodísticos (Rodear la tarde), novela (Páginas amarillas), relato (No me gustan las mujeres que lloran
), y poesía (Secreta escala, Funambulares mar, Agua de luna, La ciudad fronteriza, Poemas sobre escribir un poema y otro poema, Zona de varada, Poemas de Teresa Hassler, Cuando los pájaros
). Ha recibido los Premios Manuel Alcántara, Ciudad de Salamanca, Jaén de Poesía, Antonio Machado y Andalucía de la Crítica, así como el Galardón Día de Andalucía de las Letras y la Insignia de la Ciudad de Algeciras. Forma parte de las Reales Academias de Doctores de España, de Córdoba y de Antequera.