Durante cerca de un siglo y hasta el 28 de febrero de 1976 los españoles y los saharauis convivieron en lo que llegó a ser la más extensa provincia del territorio nacional: el Sáhara Occidental. Dos etnias y dos culturas diferentes que se enriquecieron mutuamente con este encuentro sobre el desierto, alumbraron el único país árabe y uno de los dos de África que habla español y crearon lazos indestructibles que perduran hasta el día de hoy. Este es un relato sobre las aventuras y las travesuras que compartieron tres amigos, dos de ellos saharauis y uno español, que se encontraron en un pequeño pueblo situado en la península de Cabo Blanco. Un relato de ficción pero que pudo ser, sin embargo, real.