Esta obra analiza el papel que desempeñan las diversas elites, como la política, la académica, la ejecutiva y la de los medios de comunicación en la perpetuación de la dominación étnica. La carga racista está presente en el modo en que algunos parlamentos occidentales debaten los temas de la inmigración y asuntos étnicos, en los comentarios que se leen en los manuales universitarios de sociología sobre las relaciones étnicas y en el lenguaje empleado por los ejecutivos de grandes empresas en referencia a la contratación de minorías y de la acción positiva. El método de esta investigación combina ideas, teorías y conceptos de la psicología social, la sociología, la antropología y las ciencias políticas, integrándolas en el marco teórico unificador del análisis del discurso. Las definiciones de elite parten del supuesto de que el poder de elite actual y su influencia son a menudo discursivos, se implementan mediante su acceso preferente al discurso público para controlarlo y crear consenso. Esto se observa particularmente en las elites que controlan los medios de comunicación y que se dedican a encauzar la