Ociosos terratenientes y jóvenes de talento se dan cita en la casa de verano de la ilustre y rica viuda Daria Mijailovna. La llegada de uno de esos jóvenes suscita entre los asiduos una variada escala de reacciones que va del más absoluto desprecio a la más apasionada devoción.
En medio de este clima tenso y contradictorio, captado desde una refinada distancia teatral, Turguéniev elabora en «Rudin» (1856), su primera novela, un espléndido retrato del "hombre superfluo", del mediocre brillante, inspirada por el «Eugenio Oneguin» de Pushkin, y que acabaría convirtiéndose en un prototipo de la literatura rusa del siglo XIX.
Iván Turguéniev nació en Orel en 1818. Estudió Filosofía en Moscú, San Petersburgo y Berlín. A partir de entonces su vida transcurrió entre su país y distintas ciudades de Europa. Su primera novela, «Rudin» (Alba Clásica num. XV), se publicó en 1856. Siguieron, entre otras, «Nido de nobles» (1859), «En visperas» (1860), «Padres e hijos» (1862), «Humo» (1867) y «Tierras vírgenes» (1876). Murió en París en 1873.