Lo que comienza como una celebración termina en tragedia. Los Hardcastle han organizado una fiesta en su casa de campo, para anunciar el compromiso de su hija pequeña, Evelyn. Al final de la noche la joven es asesinada. Pero Evelyn no morirá una sola vez. Hasta que Aiden Bishop, uno de los invitados, no resuelva su asesinato, el día se repetirá constantemente, siempre con el mismo triste final.