Jeri pronto cumplirá los cuarenta y le amarga la posibilidad de una soltería permanente. Acaba de romper por segunda vez con Jake y ha decidido que ya es hora de retirarse del mercado sentimental con la mayor dignidad posible.
Sin embargo, algunos sucesos inesperados la llevarán a comprender que, a menudo, lo que más se des ea es lo que menos se necesita... y que el mejor plan suele ser el que no estaba previsto.