CALLE COLLADO, ANGEL / ALVAREZ VISPO, ISABEL
El actual sistema agroalimentario globalizado no nos nutre. Nos rodea de hambrunas, siembra desigualdades, acumula malestares, hace inviables las pequeñas producciones agroganaderas, condena territorios al sacrificio, echa más fuego a la emergencia climática, erosiona fertilidad y demanda crecientes cantidades de agua. Nos afecta mucho y decidimos poco. Una veintena de multinacionales (el Big Food) dicta qué productos llegan a nuestras mesas y con qué tóxicos y consecuencias ambientales se producen. ¿Qué hacer Desde hace miles de años, pueblos indígenas y campesinado vienen desarrollando sistemas alimentarios sustentables, marcados por la cooperación, el cuidado del territorio, el intento de cerrar ciclos materiales y energéticos con lo que se encuentra accesible. Hoy en día esa respuesta se reconoce como Agroecología. En estos tiempos plagados de incendios y faltos de soberanía alimentaria es importante rastrear de nuevo las tres C que constituyen la base de las prácticas agroecológicas: el cierre de ciclos ambientales, el cuidado de personas y planeta, el fomento de la cooperación social en una biorregión.