La única cosa del colegio que le gustaba a Marga eran las láminas de animales. Por eso, aquella tarde se llevó a casa el librote grande de las fieras. Al fin y al cabo, sólo era un libro...
Artículos relacionados
Vista previa: UN COCODRILO EN MI HABITACION
Utilizamos cookies propias y de terceros con fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica AQUÍ para más información. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón "Aceptar cookies" o configurarlas o rechazar su uso clicando "Denegar".