Esta obra analiza el relato de la psiquiatría y la psicología como actividades científicas,desvelando las verdades y mentiras que rodean semejante discurso. Sin desdeñar el avance de ambas disciplinas y su aportación a la curación de las enfermedades mentales, Verdades y
mentiras
pone en entredicho muchas de las aseveraciones en las que se asienta ese argumento. Así, los psicofármacos en ocasiones no son mucho más eficaces que los placebos, y las diferencias entre las escuelas psicológicas (psicoanálisis, conductismo
) tienen mucha menos importancia que el vínculo que se pueda establecer entre terapeuta y paciente.
El rol del psiquiatra pasa de curador de la enfermedad a diácono del bienestar que alivia o pretende aliviar el sufrimiento existencial.En nombre de la ciencia, el psiquiatra forma parte de esa cadena donde se amalgaman la felicidad como paradigma, el sufrimiento como lacra a extinguir y la administración como ineludible benefactor social.
Arropada con su discurso científico-técnico, la psiquiatría no ha podido superar los retos que la sociedad actual le propone. La verdadera gran mentira que nos ha hecho creer es que la praxis actual
está a años luz de la de nuestros antepasados,los chamanes.