Fernando, tras una carrera brillante aunque despreciada por su padre, un exitoso ingeniero, se acaba de iniciar como periodista cuando se cruza con un rico empresario que le propone, para su sorpresa, la tarea de encontrar a su hijo, Michael, que ha partido sin dejar rastro tras una vida que le satisfaga. La trama llevará a Fernando a escenarios bellísimos de la Patagonia y a playas del Caribe que el autor describe con esmero. Esos escenarios invitarán al lector a detenerse en el disfrute de la naturaleza y a reparar en el desprecio del ecosistema. Las tragedias se suceden, como también los momentos de felicidad que brotan a menudo de las cosas más simples y sencillas. Late en estas páginas una oda a la amistad, a apostar al otro. Alejandro G. Roemmers nos propone una historia inteligente que desnuda la incomunicación, las rigideces, los tabúes, las represiones y la forma egocéntrica y carente de empatía a la que nos conduce la vida urbana, autómata e inconsciente. Una novela memorable, un viaje de autoconocimiento y reflexión sobre la forma en que vivimos. Vivir se escribe en presente" no es solo una nove