A lo largo de medio siglo la trayectoria poética de Pureza Canelo desde Celda verde hasta Retirada está presidida por un motivo: la autocrítica de la poesía y de la existencia. Mientras la poeta persistirá pidiéndole al poema, desde su primer título, que sea un espacio habitable donde poder vivir autónomamente, la existencia se le irá revelando como un lugar sacudido por la desafección, la orfandad y la soledad. La poesía de Pureza Canelo es también un ejemplo de ejecutoria largamente gestada hasta alcanzar su objetivo expresivo: el poema solo se abandona, jamás se termina. Este afán de corrección, esta disconformidad e incluso insatisfacción con lo escrito es también una problemática de signo temporal y en último extremo moral. El tiempo de la creación como el de la vida es un período de revisión continua. Poetizar entraña hacer, rehacer, interpretar y deshacer. José Teruel